Aunque fuimos advertidos de que una pandemia era cada vez más posible, no imaginamos que nos sucedería a nosotros.
No era más que una vaga posibilidad, algo que ocurriría en un futuro, aunque nadie imaginaba que acabaría pasando.
Nos desconcertó a todos. Nos confinó a todos. Nos amenazó a todos. Nos afectó a todos. Trabajo, escuela, ocio, iglesia, todo se quedó paralizado. Fue un golpe que pilló con la guardia baja a la mayoría.
¿Cómo afectó esta pandemia a la sociedad? ¿Cómo afectó a la iglesia? ¿Qué huella dejó a nivel eclesiástico?
¿Qué lecciones podemos aprender de esta pandemia?